Curando heridas..

Sonrie cerrando los ojos en un acto reflejo al recibir el beso. Posa las manos en su cuello, con cuidado para no apoyarse en la herida.
- Me gustan los retos.. - susurró guiñándole un ojo- No siempre se tiene la oportunidad de enamorar a una herbolaria loca como yo... - rió con suavidad guiñandole un ojo- Aunque más que raro eres un cabezota... - comentó sonriendole para besarlo- Oye... solo quiero que estés seguro... no quiero que me prometas nada que no puedas cumplir... ni me digas algo que no sientes... Prefiero un silencio ok? Porque... si es sincero... me entregaré completamente a ti... y no quiero sufrir más... - susurró bajando la mirada unos segundos, afirmando una de sus manos a su cuello.

-Si te lo he dicho es precisamente porque es lo que siento, no quiero que pienses que no te amo y que te lo digo por decir... Te amo, Margot... Y quiero estar contigo... Así que por favor, te pido que no seas tú quien tenga dudas... Ya he pasado demasiado mal de amor para toda la eternidad... No quiero que mi corazón vuelva a llorar de nuevo-le pidió, su mirada era suplicante, algo realmente peculiar en él.

Tomó sus mejillas con ambas manos, mirandolo fijamente.
- Te creo... confío en tí Merek... si no.. si no no estaria aqui... no te habria dejado tocarme... ni besarme por primera vez... - susurró, algo avergonzada por lo último, pero no importaba- Se que quiero estar a tu lado... no se como, pero lo se... hasta el fin de mis dias...- susurró contra sus labios- ¿aceptarias a una humana...?

-Tú ya no eres una humana normal y corriente, ahora eres MI humana, te amo Margot, y a cada minuto que pasa lo sé aún más claramente...-le dijo-. Ahora... Creo que debo tumbarme, me empieza a doler otra vez... Parece que nunca se va a acabar...-le dijo mordiéndose el labio inferior tratando de contenerse. Le dolía, pero al mismo tiempo no quería romper ese momento... Maldijo una y otra vez su maldita clavícula, que no le permitía ni siquiera estar un momento en paz.

Observó la zona, realmente empezaba a incharse... Suspiró levantandose de sus piernas.
- Lo mejor sera que vuelvas a la habitación y te tumbes un rato... asi preparo los sedantes para que no te duela... Se acabará, pero más rapidamente si te quedas en la cama en lugar de pasear por ahi- Comentó divertida, pero en parte regañandolo un poco- Acuestate... iré a verte en cuando todo este listo... te lo prometo - susurró sonriendole para besarlo calidamente. Se alzó recogiendo las cosas en su baúl, dispuesta a cerciorarse de que se iba a la habitación.

-Está bien, visto lo visto será mejor que te haga caso y me quede en reposo... Pero prefiero ir a otra habitación, no quiero preocupar a mi hijo y a su prometido, ya han hecho demasiado por mí-comentó mientras la apartaba un poco con el brazo sano para poder levantarse, y cuando lo hizo, sintió un fuerte pinchazo que lo hizo mascullar de dolor-. No pasa nada...-se apresuró a decir-. Ha sido un tironcito sin importancia...

-Un tironcito suficiente para hacerte mascullar... - lo miró negando levemente en gesto de desaprovacion- ... "Prometido"... - relacionó conceptos dejando caer el baúl con un sonido sordo en el cesped, girandose para mirarlo- "Prometido"??? Christophe se promete y no tiene ni siquiera la decencia de contarmelo??? Lo mato!! - miró hacia el balcón agitando un puño en alto, serenandose al caer en la cuenta de que no estaba sola- Perdon!- se apuró a decirle- es que ese desgraciado nunca me cuenta las cosas... - masculló - Mmm.. puedes utilizar la que está en el extremo contrario.. iré a verte en cuanto pueda.. - se puso de puntillas para besarlo- Te quiero.. - se separa con una media sonrisa encaminandose al invernadero.

Se quedó unos momentos aturdido por ese beso, sin saber exactamente qué hacer. Le resultaba extraño sentir amor por alguien, y más sabiendo que jamás podría olvidar a Cattia... Pero en esos momentos comprendió que a pesar de ello, podía dejarla atrás y seguir recordándola. Sonrió, sabiendo que de haberse visto a sí mismo se habría visto con cara de idiota, y después se dirigió a la habitación que le había indicado Margot.

Nuevamente se habia dormido... era consciente del descanso de su cuerpo... era consciente del cuerpo de su amado... Se sentia tan bien...
Pero... le faltaba algo... Abrió un ojo perezosamente... ¿Merek..? Su impulso fue levantarse de un salto... pero se quedo en intenciones, se sentia demasiado agusto para hacerlo... Ese cabezota seguramente estaria dando una vuelta... esperaba que Margot no lo encontrase, aunque no sabia quien de los dos saldria peor parado... Miro perezosamente a su amado, sonriendole con dulzura. Lo tenia ahi...
- Como te amo...- musito en una reflexion en alto

Se despertó al sentir movimientos a su lado. Había dormido a gusto una vez más, desde que estaba con Chris todos sus sueños eran hermosos, irrepetibles... Lo amaba... Y él acababa de decirle eso mismo. Lo miró aún algo adormecido y le sonrió ampliamente.

-Buenas noches...

Se arrastró para poder tumbarse completamente en la cama, acariciando su costado para besarlo con suavidad.
- Tengo que dejar de pensar en alto... - sonrie con suavidad- Siento haberte despertado mi amor... - susurró acariciando su rostro con dulzura, adoraba aquella sonrisa- Tu padre se me ha escapado... estara dando un paseo por ahi el muy cabezota... - suspira recostandose a su lado para mirarlo todavia algo dormido.

-Mmm... No te preocupes, me alegro de que seas tú quien me despierte... Es bonito poder abrir los ojos y ver tu rostro antes que cualquier otra cosa...-le dijo suavemente, mientras su cuerpo se estremecía ante su contacto-. Y con respecto a mi padre... No te preocupes, ya sabes que nadie puede frenarlo cuando decide algo, y si dijo que no se iba a quedar quieto no lo hará...

- Por primera vez me alegro de que haga lo que no debe... - musitó sonriendo para besar su barbilla, descendiendo por su mandibula para llegar a su cuello, deleitandose con aquel contacto, sintiendo un escalofrio al degustarlo- Hoy he vuelto a dormir... si no es contigo soy incapaz de hacerlo.. - susurra aún contra su piel, mirandolo antes de volver a besar su garganta, acarició su vientre bajo la camisa, disfrutando de aquella piel tan perfecta...

-Yo me alegro de que conmigo puedas dormir a gusto... Me siento feliz por ello, no me gustaba nada que no pudieses dormir...-le dijo suavemente, sintiendo sus mimos-. Mmm... Tal vez quieres hacer algo conmigo que no querías que mi padre viese... ¿O me equivoco?-le preguntó con un tono de voz realmente seductor e incitante-. Venga... Ya sabes que es tuyo, nada te detiene a la hora de tomarlo...

- Tu padre se replantearia un par de cosas si me viese hacerte esto... - susurró divertido dirigiendole una sonrisa de complicidad. Apoyó su frente en la suya- Se que nada me detiene... pero adoro que me acompañes... - comentó contra su boca, estremeciendose ante su tono, tan deliciosamente sensual como siempre- Lo que me recuerda.. tengo algo que enseñarte... - Se alzó para para abrir un armario, sacando una sabana de lino- Vistete con esto... ahora volvere a por ti... -susurra con una media sonrisa complica besandolo intensamente antes de desaparacer por la puerta.

Lo miró salir extrañado, preguntándose qué habría planeado en esa ocasión. Se colocó la prenda alrededor de la cintura, lo justo para poder tapar sus atributos, y se sentó en el borde de la cama a esperar a que regresase. Sabía que Chris era muy romántico, y de seguro lo llevaría a un lugar tan romántico como él, aunque en esos momentos no caía en algún sitio romántico al que se pudiese entrar con solo una toalla encima...

Tras un par de minutos aparecio en el cuarto con una una sabana atada a su cintura que lo cubria hasta los tobillos, deteniendose para observarlo con una media sonrisa. Aquel cuerpo era demasiado...

- No ha habido espectaculo... pero sigues resultandome irresistible... - susurró mordiendose su labio inferior para controlarse. Le colocó un manto a los hombros- En el palacio hace un poco de frio ahora.. pero estamos cerca - explicó colocandose su capote de igual manera. Lo tomó y sin más explicacion descendio por las escaleras hasta un estrecho y humedo pasillo. Avanzo guiandolo hasta el final empujando la pesada puerta, dejando al descubierto las hermosas termas. Las amplias piscinas estaban labradas en la piedra, con columnas que se abrian en el agua para sujetar el techo hermosamente talladas, la superficie estaba cubierta de petalos, y los aromas eran realmente increibles.

- Te prometi... que te enseñaria nuestras pequeñas diversiones... y que las flores eran mi especialidad... - susurro en su oido, retirando su manto haciendo lo mismo con el propio. Se cercioro de que la puerta estuviese cerrada, aquel era un momento de ambos... Dejó caer la toalla metiendose en la piscina, que le cubria por la cintura, lo miro de reojo con una media sonrisa para que lo acompañase.

Cuando entró a las termas, se quedó realmente patidifuso, no podía creerse lo que veía... Era como tener un pequeño paraíso en su propia casa. Se sonrojó al ver cómo Chris de desnudaba ante él como si nada, pero tuvo que salir de su aturdimiento cuando le indicó que se acercase. Dejó que su toalla cayese, tal y como había hecho su prometido, y se metió en las cálidas aguas de rosas con él, soltando un suspiro de puro placer.

-Es maravilloso...

Sonrió al ver como se desnudaba... daba igual como lo hiciese, lo adoraba... Lo tomó por la cadera cuando sintió que estaba junto a él, mirandolo con ternura.
- Me alegro de que te guste amor mio... - susurró inclinandose para besarlo suavemente- ¿No tienes frio no..? - se interesó abrazando su cintura para recorrer con su boca su cuello en una lenta caricia. Como le gustaba el roce de su piel... era... indescriptiblemente placentero, en todos los ambitos extasiante... - Te amo...

-Mmmm... Contigo es imposible pasar frío...-le dijo. Y era cierto, su cuerpo ardía, sobre todo en la zona que contactaba con la piel de Chris. En su interior se había instalado un fuerte deseo que apenas lo dejaba respirar con normalidad, y que hacía que su corazón latiese con fuerza y desenfreno-. Ummm... Nunca he probado a hacerlo en unas termas, ¿sabes?-le dijo seductor.

Sonrió al escucharlo, llevandolo lentamente contra la pared de una de las columnas.
- Yo tampoco... pero he escuchado que no es nada desagradable... - susurra sensualmente pegandose a su cuerpo, lamiendo su cuello suavemente camino a su clavicula- No sabes cuanto te deseo...- musita suspirando contra su piel, acariciando su cintura por los costados.

-Y yo a ti, por eso me apetece probarlo... Mmm... aahh...-musitó gimiendo débilmente ante el trato que recibía por parte de su amado-. Quiero que vuelvas a estar dentro de mí, que me llenes por completo...-le pidió apartando a un lado su rostro, dejándole fácil acceso a su cuello-. Quiero ser tuyo para siempre, quiero estar contigo eternamente y que caminemos de la mano hacia ese incierto futuro que nos aguarda... Te amo, Chris... Hazme tuyo de nuevo...

Besó su cuello aceptando el espacio que le era cedido.
- No dudes en que lo haré amado mio... como si pudiese resistirme a ti... - Comenzó a descender por su garganta, descendiendo por su pecho acariciando sus costados, mordiendo con suavidad su piel, intentando frenar aquella urgencia que alentaba su boca por el deseo que abrasaba su cuerpo.

Gemía suavemente a cada trato que recibía de él, sin poder resistirse a esa oscura tentación. Las manos de Chris no sólo llevaban deseo, sino que también guardaban ese amor que ambos se profesaban, se sentía completo siempre que estaba a su lado, pero en ese momento era aún más notable cuánto lo necesitaba. Se aferró a sus hombros con deseo contenido.

-Por favor... hazlo...-le dijo, le resultaba casi imposible soportar la espera.

- ¿Ya...? - musitó con una media sonrisa descendiendo con sus manos para acariciar la cara interna de su muslo, mientras su boca atrapaba uno de sus pezones lamiendolo detalladamente. Se estremeció cuando sintió aquel abrazo, estaba tan desesperado como él, lo necesitaba con una intensidad que distaba mucho de ser racional..